Desde hace 17 días Roberto Rojas era el hombre más buscado en Tucuman y todo el país, quien había recibido cadena perpetua luego de ser encontrado como único culpable del genocidio de su expareja Milagros Avellaneda, y del asesinato de su hijo, Benicio. El homicida a horas de recibir la sentencia fue resguardado en un cuartel de bomberos del cual se escapó alertando a las autoridades a realizar una intensiva búsqueda que terminó el día de ayer.
A pesar de alertar a los medios de todo el país, Roberto Rejas no llegó muy lejos, sino a la provincia de Salta y en donde decidió esconderse en un camping de la provincia, ubicado en el departamento de Coronel Moldes, donde se hacía pasar por un estudiante llamado "Leo". Los turistas que se encontraban vacacionando o visitando en el lugar quedaron sorprendidos al darse cuenta de que se trataba del autor del doble homicidio que conmocionó a la provincia de Tucuman.
El ex penitenciario se escapó de la custodia de los policías el pasado 27 de septiembre, luego de recibir sentencia y encontrarse resguardado en un cuartel de Bomberos, momento en que pidió permiso para ir al baño y logró escaparse, suponen, por el ventiluz del baño. Su actual pareja, Patricia Gomez quedó detenida por ser acusada de colaborar con la fuga de Rejas del lugar.
Inmediatamente luego de ser capturado, desde Tucuman se envió un equipo de la División de Homicidios para que reconocieran a Roberto Rejas y lo trasladaron nuevamente a la provincia para cumplir con su condena por doble homicidio de su expareja y su hijo. Luego de una intensiva búsqueda a nivel nacional e internacional, gracias a un llamado anónimo al ECIF del Ministerio Público Fiscal de Salta, la policía concurrió al lugar vestido de civil para que no alertara a Rejas y lo capturaron sin que el acusado se resistiera.
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